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Cuando un club no paga y cierra y los que lo pagan son sus socios: "No poder ir es perder salud" El cierre del centro Ranillas Urban Club, situado en el parque Luis Buñuel de Zaragoza el pasado mes de enero "sin previo aviso", según cuentan muchos de sus usuarios, ha dejado a más de uno sin palabras.  "No poder ir es para mi perder salud", explica una socia que lleva más de 10 años acudiendo al spa, un centro que define como "curativo" de cara a sus afecciones circulatorias. Más de 600 firmas recogidas "Es urgente su reapertura, por su demostrada contribución en la terapia y rehabilitación de afecciones, contracturas y dolencias musculares y de las articulaciones que muchos padecemos", relatan los socios en un papel que han presentado al Ayuntamiento de Zaragoza tras recoger más de 600 firmas. Insisten en que no representan a nadie más que a ellos, los usuarios, "que estamos resintiendo en nuestra salud física y psíquica los efecto...

La carta desesperada de un vecino de la calle Eduardo Dato: "¡Qué banda de cobardes, malparidos..." ¿Cómo convivirías con esto? "¡Vamos a por el tercer muerto, ya verás!",  insiste de manera enérgica un vecino de la calle Eduardo Dato en Zaragoza esta mañana. Con dos fallecidos en sus calles, el último el año pasado , y la reapertura de uno de los locales más conflictivos, Los vecinos de esta zona del centro de la capital aragonesa acaban de pasar otra noche violenta, en la que aseguran que esta vez los vándalos la han tomado con parte de su propiedad. "Solicité la presencia policial para realizar mediciones de ruido este viernes. Dos fueron positivas pero una tercera no", explica un vecino. Una hora después, otro de los vecinos del bloque salía de casa para ir a trabajar y se encontró con cristales rotos en el suelo del portal.  "Se habían cargado la puerta a golpes. Había sangre en el suelo. Se la cargaron en venganza porque saben que llamamos a la ...

Una conductora detenida por circular más de 20 kilómetros en dirección contraria por la A-2 Qué haces si te la encuentras? Sucedía a media tarde. Esta misma semana. en la gasolinera de la localidad de Monreal de Ariza, una mujer paraba su vehículo y se dirigía a los trabajadores de la gasolinera con estas palabras: “¡Me persigue la Interpol!” Esta frase alertaba al personal, que veía como esta mujer se movía y hablada de una manera extraña y muy alterada. En ese momento, la mujer se despedía de ellos y comenzaba a circular por la autopista A-2 dirección Zaragoza.  Según fuentes consultadas por ARAGONEWS,  los trabajadores avisaron a la Guardia Civil: “Hay una mujer muy alterada conduciendo por la autopista y podría provocar algún accidéntense”. 20 kilómetros en dirección contraria Varias patrullas de Seguridad Ciudadana y Tráfico de la Guardia Civil interceptaron el vehículo y le siguieron en un recorrido de varios kilómetros hasta la altura de La Muela donde la mujer, que seg...

Convencía a familiares para que la acompañasen a robar a ancianos a Zaragoza Ella robaba y su suegra vigilaba. La compinche de esta vieja conocida de la policía, esta vez su suegra, tiene cerca de los 70 años. Lejos de pensar en su jubilación o de cuidar de sus nietos, colaboró con su nuera en al menos cuatro robos en supermercados desde principios del pasado mes de diciembre. El Grupo de Hurtos de la Policía Nacional seguía sus pasos y no era la primera vez que le pillada ‘in fraganti’.  ¿Cómo lo hacían? Siempre “en familia”. Rara vez actuaba con alguien que no fuese de su sangre o parentesco cercano. Venían desde la localidad riojana de Calahorra hasta Zaragoza en autobús. Una hora y media de trayecto; ciento veintiséis kilómetros para asaltar a ancianos que previamente seleccionaban mientras hacían la compra solos en centros de alimentación de grandes superficies. El último golpe lo dieron en un supermercado de la calle Alfonso I. En pleno centro de la ciudad. Ella robó la carte...

"Somos menores, y no nos podéis tocar". Así fue la agresión a un Policía en Zaragoza... Por disolver un 'botellón' "Os vais a enterar. Vais a pagar por lo que estáis haciendo. Somos menores y no nos podéis tocar", explican fuentes cercanas a lo sucedido la pasada noche del 3 de febrero, en la calle Parque de la Memoria, en Zaragoza. Los agentes de Policía se dieron cuenta de que había 20 jóvenes bebiendo, sin mascarilla y sin guardar las medidas de seguridad. Fueron a identificartes, y cuatro de ellos, tres chicas y un chico, salieron corriendo llevándose un altavoz de grandes dimensiones. Según este mismo relato de los hechos realizado por fuentes consultadas por ARAGONEWS , uno de los agentes persiguió e interceptó a los huídos.  En ese momento, este joven y otro más agredieron al policía, que recibió un golpe en la cabeza y calló al suelo. Una vez en el suelo, le siguieron golpeando, dándole puñetazos y patadas. "Soy menor y te voy a matar", dec...